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Capítulo 1: La Pregunta del Milenio

Los hombres durante mucho tiempo han especulado sobre qué va a pasar en lasedades que han de venir. ¿Cuál será la condición del hombre cuando sea levantado? (1 Corintios 15:35.) ¿Cuál es el propósito del reinado de Cristo en la era venidera, conocido por los Hebreos y por los primeros Cristianos como la Era del Reino, o la Era Mesiánica? ¿Cómo se distingue de la próxima era, descrita como “el nuevo cielo y la nueva tierra" que tenia en ella una "Nueva Jerusalén?”

Posiblemente aún más confuso para la gente de hoy en día es todo este comentario hacia nuestro destino y morada final en el cielo. Si el hogar de los cristianos está en el cielo, ¿para qué tienen que volver los santos a la tierra en el momento de la resurrección de los muertos para poder reinar con Cristo como dice el libro de Apocalipsis 5:10 y en muchos otros lugares como este? ¿Cuál es el propósito del milenio? Yo he tenido varios encuentros con personas en el ministerio, quienes estaban muy perplejos ante estas y otras preguntas similares. Si ellos se encuentran perplejos, no debería de ser ninguna sorpresa que aun muchos típicos cristianos de termino medio estén también confusos y turbados. Es posible que algunos hayan adoptado enseñanzas contradictorias y por lo tanto no tienen los medios para poner por ellos mismos todo esto en orden.

Es nuestro propósito en este libro, el abrir los sellos en este tema y abiertamente introducirnos en lo que llamaríamos una aventura increíble. Solamente le podemos quitar el cerrojo con la llave del entendimiento con relación a los Tres Festejos principales de Israel.

Las Tres Festividades de Israel

La Pascua era la primera fiesta de Israel, se llevaba a cabo al final del mes de marzo o al principio del mes de abril. El pueblo se reunía en el lugar donde Dios había puesto su nombre, trayendo los primeros frutos de la cebada, que era la primera cosecha que maduraba en la primavera. Cincuenta días después que se ofrendaba la cebada, se reunía el pueblo una vez mas delante de Dios para ofrecerle los primeros frutos del nuevo- trigo maduro. Aproximadamente cuatro meses después, en el mes de Septiembre, se reunía el pueblo por una tercera vez para presentar a Dios y dedicarle los primeros frutos del vino, puesto que éste era el tiempo de la cosecha de las uvas.

Estas tres festividades son en muchas maneras proféticas. Expresan los tres estados de desarrollo que el Reino de Dios ha tenido sobre la tierra. Estas fiestas nos enseñan los tres ungimientos o manifestaciones del Espíritu las cuales están asociadas con cada paso que se ha dado en el desarrollo del Reino. Finalmente, los primeros frutos son la sombra y el tipo de la gran cosecha por venir.

La era de la Pascua fue desde el tiempo de Moisés hasta Cristo, mostrando la unción desde un primer nivel de ungimiento y de poder, en el cual el Reino de Dios operaba relativamente en una proporción de infancia en la casa de Israel. El día de Pentecostés (Hechos capitulo 2) fue cuando comenzó la era de Pentecostés acompañada de un poder más desarrollado del Espíritu Santo, y esto le produjo o aportó al Reino de Dios un poder enteramente Nuevo. Pero aun Pablo reconoció en tres ocasiones diferentes que esto era solamente la primicia del Espíritu, una prima o enganche (arras) de algo mejor que habría de venir. Pablo tenia en mente la Era de Tabernáculos, en la cual iba a ser derramada la Plenitud del Espíritu, y sería establecido en una forma mas elevada y con un poder más grandioso El Reino de Dios en la tierra.

La clave para poder entender el Reino de Dios está en poder distinguirlo en sus tres estados de desarrollo, en vez de comparar o confrontar un punto de vista con el otro. Algunos creen que el Reino de Dios ya está aquí, y ciertamente están correctos. Otros dicen que el Reino de Dios es algo futuro, por venir, y éstos también están correctos. Unos pocos también creen que el Reino de Dios comenzó con Moisés, y estos también están correctos. El Reino Dios verdaderamente comenzó en el tiempo de Moisés cuando por primera vez en el monte de Horeb Israel fuera instituido como un Reino. Pero el Reino de Dios fue manifestado de una forma superior bajo la unción Pentecostal en el capítulo 2 del libro de los Hechos.

Pero también el Reino de Dios en este momento, al escribir este libro, es algo aún futuro. Esperamos el derramamiento del Espíritu bajo la Fiesta de Tabernáculos, la cual revelará el Reino de Dios en la tierra en su forma más suprema y gloriosa. Solamente este punto de vista es suficientemente amplio para poder encerrar y abarcar a los que creen en la idea de que el Reino está Aquí y Ahora, como también el punto de vista del futuro Reino.

Bajo la dirección de Moisés, el pueblo de Israel sin duda alguna pensó que en ese entonces el Reino de Dios había venido en su plenitud. A ellos no se les reveló que aún habría algo mejor por venir, aunque por medio de los profetas, quienes llegaron mas tarde, les fue dada una revelación progresiva de este grandioso Reino. Aún así, la mayoría de la gente no entendió el significado verdadero de sus propios días festivos. En su deseo y celo de agradar a Dios se enfocaron en extremo en los ritos. Esta fue una de las razones por la cual no reconocieron al verdadero Cordero de Dios cuando era señalado a la gente por Juan (Juan 1:29), ni tampoco pudieron ver que Él tenía que morir en el tiempo de la Pascua por los pecados del mundo.

La iglesia primitiva entendió claramente el significado de la Fiesta Solemne de la Pascua. Ellos expusieron con claridad el motivo de la muerte de Jesús. Pero el pueblo en su mayoría tenia solamente una perspectiva de Pentecostés. Habían pasado a un nivel más desarrollado, y esto sin duda alguna había aumentado su entendimiento del plan Dios. Sin embargo, tenían muy poco o carecían del entendimiento de la Fiesta de Tabernáculos. Pentecostés era para ellos el principal y fundamental punto focal, y eso lo podemos entender, porque era algo nuevo y maravilloso aquí en la tierra. Para muchos, el fin y la meta de toda la historia. Pero la revelación de Tabernáculos no fue entendida claramente, porque era muy temprano para que esto fuera revelado. La gente del Reino tenía que tener la oportunidad de explorar las maravillas de Pentecostés antes que fueran abrumados con una revelación más profunda y trascendente de Tabernáculos.

Guardando Dios para el final de la Era Pentecostal, en el siglo veinte, la revelación de la fiesta de Tabernáculos. Los tipos, sombras y figuras de la escritura parecen indicar que la era Pentecostal debía de existir aproximadamente 40 ciclos o periodos de Jubileos, o 1960 años (49 x 40.) Un ciclo de tiempo de Jubileo es 49 años. El año del Jubileo era el Quincuagésimo año, pero también era el primer año del siguiente período de Jubileo. Dios mide el tiempo en sietes, de esta forma 40 Jubileos de tiempo serían 1960 años. Puede ser, que la Era Pentecostal, que principió en el año 33 DC, comenzó a cerrarse en el año1993 DC en preparación para una era más grande la cual vendrá bajo la unción de Tabernáculos.

La Primera Resurrección

Con relación a los creyentes fieles, el libro de Apocalipsis 20:4-6 dice así:

4 También vi tronos, y se sentaron sobre ellos, y se les concedió autoridad para juzgar. Y vi las almas de los que habían sido decapitados por causa del testimonio de Jesús y de la palabra de Dios, y a los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, ni habían recibido la marca sobre su frente ni sobre su mano; y volvieron a la vida y reinaron con Cristo por mil años. 5 Los demás muertos no volvieron a la vida hasta que se cumplieron los mil años. Esta es la primera resurrección. 6 Bienaventurado y santo es el que tiene parte en la primera resurrección; la muerte segunda no tiene poder sobre éstos sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con Él por mil años.

La “primera resurrección” es una resurrección particular y limitada. Ya que la Biblia dice que son ”bienaventurados y santos” (vr.6), sabemos que solamente creyentes heredaran vida en esta primera resurrección. Dice que los demás muertos continuarán en esa condición por otros mil años.

Con relación a esta primera resurrección existen dos fundamentales y básicos puntos de vista. Algunos creen que esta primera resurrección es simplemente el momento de la salvación del creyente. Al momento de la salvación, dicen, pasa el creyente de muerte a vida, y esto para ellos es equivalente a la resurrección. Luego los creyentes son llamados para gobernar y reinar con Cristo aquí en la tierra en una vida y de una manera vencedora. Ellos interpretan los “mil años” como un período de tiempo indefinido, en el sentido de que la palabra Griega está en el plural y por lo tanto debería leerse “miles de años,” en ves de simplemente un mil años.

Por otra parte, creemos que el término “resurrección” nunca es usado en la Biblia para significar algo mas que un simple levantamiento físico de entre los muertos. Nosotros entendemos sin ninguna duda que al creyente en el momento de su justificación se le otorga la vida, pero esto no niega la necesidad de una resurrección. El apóstol Pablo lo dijo de una forma muy simple en 1 Corintios 15, enseñando que la resurrección de Jesucristo era el patrón y la base de nuestra propia resurrección. Jesús cuidadosamente se tomo el tiempo de explicarle a sus discípulos que él había sido levantado o resucitado en un cuerpo físico, aunque ciertamente él no estaba sujeto a las limitaciones de esta nuestra carne presente. En Lucas 24:36-43 Jesús inclusive comió delante de ellos, específicamente para probarles y enseñarles que en ese momento no era un espíritu pero manifestado en carne y huesos.

Con relación al periodo de tiempo de mil años, la palabra griega empleada en Apocalipsis 20 es chilia, que es derivada de la raíz chilioi y significa “un mil.” La palabra Griega, chilia, es técnicamente una palabra plural, pero siempre ha sido traducida en el singular. Las lenguas Hebrea y Griega usan el plural un poco diferente que el Ingles y el Castellano. Por ejemplo, en el Antiguo Testamente se encuentra la palabra elohim, la cual es plural. Y cuando tiene que ver con dioses falsos se traduce “dioses”, pero usualmente esta palabra es traducida “Dios” en el singular, cuando se aplica al Creador. Por ejemplo, Éxodos 20:1-3:

1 Y habló Dios todas estas palabras, diciendo: 2 Yo soy el Señor tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de la casa de servidumbre. 3 No tendrás otros dioses delante de mí.

Hay quienes han tratado de usar la palabra elohim para probar la creencia de la trinidad, pero esto es mas bien problemático y dudoso, puesto que otras palabras plurales no pueden ser positivamente traducidas en el plural. Un caso parecido es la palabra Hebrea paniym, “rostros”. El singular es paneh. La mesa del pan de la proposición literalmente es el “pan de rostros”, pero si los traductores lo hubieran interpretado y traducido de esta forma, solamente hubiera servido para añadir mas confusión para el lector común.

Y en el idioma Griego esto es también muy parecido. En 2 Pedro 3:8 disponemos de un buen ejemplo de la forma en que es usada esta palabra chilia.

Como chilia es plural, algunos creen que es un período de tiempo indefinido y debió de haberse traducido "miles". Sin embargo vemos muchas veces esta misma palabra en el libro del Apocalipsis capítulo 7, en donde leemos acerca de esos "doce mil" sellados de cada tribu de Israel. No sería algo correcto en el idioma castellano o inglés usar el término plural como "doce miles". Los traductores pintaron un cuadro de doce grupos de mil, cada mil es una unidad singular. Aparentemente vemos a un grupo de mil indicando 1000 objetos (o días); por esto es plural.

Puesto que Pedro estaba citando la versión Septuaginta (Los Setenta, la versión Griega del Antiguo Testamento, llamada así por ser, según su suponía, obra de 70 intérpretes) del Salmo 90:4, vemos que la palabra Griega chilia es semejante a la palabra Hebrea, eleph, que puede significar un mil singular o miles en el plural. Esto depende en el contexto, semejante a la palabra elohim o paniym.

Un hombre de Maón llamado Nabal era muy rico, y tenia tres mil ovejas y mil cabras (1 Samuel 25:2.) El número de ovejas es un número muy específico. Con relación a las cabras, significa simplemente mil cabras, no "miles de cabras". De igual manera, Jesús en el Nuevo Testamento, alimentó a cinco mil hombres, y cada grupo de un mil sirve para darnos a enseñar un número específico, no cinco grupos de un número indefinido de miles.

De esta forma, aunque aconsejamos a las personas que usen una buena concordancia, debemos de usar precaución y entender nuestras propias limitaciones. La lengua Griega y la lengua Hebrea usan el plural de una forma diferente al idioma Inglés y Castellano. Por lo tanto, cuando dice Juan en el libro de Apocalipsis capítulo 20 que algunos reinarían con Cristo por mil años, la traducción está correcta, aunque chilioi técnicamente está en el plural. Los que están en desacuerdo en esto, son una pequeña minoría, porque todos los amplios traductores la han traducido correctamente en el singular. Por eso nosotros creemos que el período de mil años es y significa una figura especifica y concreta.

La estructura del Tabernáculo en el Desierto representa los 2000 años de la Era de la Iglesia, seguido por 1000 años de la Era del Reino. El Tabernáculo estaba dividido en tres áreas: El Atrio, El Lugar Santo, y El Lugar Santísimo. El Atrio con el altar de bronce representa la Época de la Pascua. Puesto que no tenía techo, el Atrio era una área que no se podía medir cómo se podía medir el Tabernáculo de reunión. Aunque significa la era del Antiguo Testamento.

Adentro del Tabernáculo, el Lugar Santo tipifica la Época Pentecostal y su dimensión era de 2,000 codos (10x20x10 cúbicos) 20 codos de largo y 10 codos de ancho. El lugar Santísimo tipifica la era de Tabernáculos y su medida era de 10 codos o 1,000 codos cúbicos (10x10x10 codos.) Así como el hombre tiene acceso a Dios, el Tabernáculo fue edificado para enseñarnos el camino hacia Dios; y aún en las dimensiones de estos cuartos podemos ver el período de duración de Pentecostés y Tabernáculos.

Los que enseñan que no existe un futuro milenio del reinado de Cristo presumen que tenemos en este momento todo el poderío espiritual necesario para poder reinar aquí (Ahora) en la tierra. Este punto de vista no toma en consideración que Pentecostés solamente nos dio las arras o prima del Espíritu (2 Corintios 1:22; 5:5; Efesios 1:14.) Ellos no consideran que el Reino de Dios es manifestado en etapas. No entienden las limitaciones de la unción de Pentecostés. Los cristianos no pueden reinar completamente en la tierra bajo la unción de la Pascua, ni bajo la unción de Pentecostés. Solamente la unción de Tabernáculos puede producir y manifestar plenamente a los hijos de Dios.

En otras palabras, cuando un hombre es justificado por la fe en la sangre del cordero, en ese momento recibe de parte Dios una unción de la Pascua, pero esto no produce personalmente en él la plenitud del Espíritu. Cuando un hombre recibe el Espíritu de Dios a través de la unción de Pentecostés, recibe una unción fresca, pero solamente es una prima, continúa aún con imperfecciones por las cuales está falto de la gloria de Dios. Solamente cuando Dios derrame Su Espíritu sobre nosotros en el cumplimiento de Tabernáculos encontraremos lo que tanto buscamos, perfección e inmortalidad.

Los dos primeros días festivos fueron cerrados en fechas históricas de acuerdo al plan de Dios. Nadie se ha podido adelantar para entrar de una forma permanente al cumplimiento de un día festivo antes de su cumplimiento histórico. Moisés temporalmente entró a Tabernáculos cuando descendió del monte con su rostro glorificado (Éxodos 34:29; 2 Corintios 3:7), pero aún él no pudo retener permanentemente está gloria, porque Moisés y los demás vencedores no podían ser perfeccionados aparte del cuerpo general de creyentes (Hebreos 11:40.)

Existe mucha más evidencia que pudiéramos presentar, solamente que muchas de estas requieren un conocimiento profundo de profecía bíblica, lo cual está fuera de la esfera de la intención de este libro. De esta forma esperamos que estas cortas palabras sean suficientes por ahora, por lo menos para la mayoría de los lectores.

La Segunda Resurrección (General)

Mil años después de la primera resurrección es cuando se lleva a cabo el juicio del Gran Trono Blanco, en donde todos los demás muertos o (resto) de los muertos son levantados. Esto incluirá, creyentes e incrédulos. Esto fue dicho por las palabras de Jesús en el libro de Juan 5:28 -29

28 No os admiréis de esto, porque viene la hora en que todos los que están en los sepulcros oirán su voz, 29 y saldrán: los que hicieron lo bueno, a resurrección de vida, y los que practicaron lo malo, a resurrección de juicio.

Observe que esta "hora" es singular, y significa que los dos grupos, de justos e injustos serán levantados a la misma vez. Obviamente ésta no es la primera resurrección, porque en ella solamente los creyentes son levantados. Ésta es una descripción muy clara de la Segunda Resurrección, donde todos aquellos que permanecieron en los sepulcros serán levantados para juicio.

Note que los creyentes serán levantados en esta hora, juntamente con los incrédulos. Dice la palabra, que a los justos se les otorgará la vida, mientras que los injustos serán juzgados. Hoy en día muchos enseñan que todos los creyentes serán levantados en la primera resurrección; y que todos los incrédulos serán levantados en la siguiente resurrección. Si las palabras de Jesús tienen alguna validez, esto simplemente no puede ser verdad. El apóstol Pablo nos ofrece un segundo testimonio en el libro de los Hechos 24:14-15. En la Segunda resurrección serán incluidos los buenos y los malos.

Esto solamente puede referirse a la segunda resurrección, no a la primera, porque en la primera resurrección solamente el "bienaventurado y santo" será levantado. Podemos concluir, que no todos los cristianos serán levantados en la primera resurrección. Algunos deben de permanecer en los sepulcros hasta el tiempo de la segunda resurrección, de otra manera estas declaraciones de Jesús y de Pablo serían incorrectas.

Cuando miramos detalladamente en el libro de Apocalipsis capitulo 20 la descripción de esta segunda resurrección, encontramos sugerencias que señalan que ese suceso es un tiempo de juicio para los creyentes. Simplemente el gesto y la acción de abrir el libro de la vida (20:12) sugiere esto. Si todos los que están allí de pie ante Dios no están inscritos en él, ¿Por qué se tiene que abrir este libro de la vida? Además, el verso 15 señala y denota esto cuando Juan dice:

15 Y el que no se encontraba inscrito en el libro de la vida fue arrojado al lago de fuego.

Ciertamente esto significa que muchos estarán inscritos en ese Libro. Y quienes estén inscritos en este libro en ese momento adquirirán la vida, así como lo dijo Jesús.

¿Quiénes son estos creyentes? ¿Por qué tienen que ser juzgados? Yo creo que la respuesta o clave se encuentra en la enseñanza de Jesús en el libro de Lucas 12:35-50. Jesús habló de aquel "mayordomo fiel y prudente al cual el Señor pondrá sobre su casa" (12:42.) Dice Jesús, que a gente como ésta se les concederá responsabilidad, categoría y posición para gobernar. Básicamente esto dice lo mismo que Apocalipsis 20:4, en donde estos de la primera resurrección "fueron levantados para reinar con Cristo por mil años."

Sin embargo, existe otra clase de siervo, o "esclavo." Tenga en mente que también este es llamado un siervo de Dios, un creyente, pero considere que desde ningún punto de vista es considerado "bienaventurado y santo."

Jesús continuó diciendo en el verso 45 de Lucas 12:

45 Pero si aquel siervo dice en su corazón: “Mi señor tardará en venir”; y empieza a golpear a los criados y a las criadas, y a comer, a beber y a embriagarse;

En otras palabras, aquellos siervos que no se consagraron, a quienes Dios les había dado autoridad sobre otros esclavos, pero que abusaron de la posición que tenían, no tendrán, por esa razón, ninguna autoridad en la era venidera. Si no que serán azotados de acuerdo a la ley que se encuentra en el libro de Deuteronomio capítulo 25. Aparte de esto, Jesús dijo que recibirán su porción o su parte asignada con los " incrédulos," esto sucede a la misma vez que los incrédulos reciben su porción o su parte.

Esto no significa que la parte o posición sea la misma de los incrédulos. Dejó Jesús muy claro esto en los siguientes versículos en donde dijo que aquel siervo que no se había preparado, ni había hecho conforme a Su voluntad, recibiría muchos o pocos azotes, de acuerdo a sus obras. No dice que será clasificado como un incrédulo o que perdería su porción (la herencia asignada.) Solamente indicó que no recibirá su porción en la resurrección de los justos. Él recibirá su parte juntamente con los incrédulos en el momento del juicio del Gran Trono Blanco.

No se olvide que cuando alguien era corregido de acuerdo a la Ley de Dios, ésta corrección o castigo se llevaba a cabo inmediatamente delante de un juez y era extremadamente limitada a 40 azotes (Deuteronomio 25:3.) Otros castigos, como el de restitución, necesitaban una sentencia que pudiera permitirle el tiempo necesario para que el pecador pudiera trabajar y así pagar la deuda cometida. De esta forma es que Jesús usa el término "muchos azotes" y "pocos azotes" para indicar una forma intensiva pero rápida de corrección que seria administrada de acuerdo a su conocimiento personal de la voluntad de su Señor.

Ellos no serán lanzados en "El lago de fuego" mencionado en el libro de Apocalipsis capítulo 20 durante la extensa Era Final, ese es el destino de los incrédulos y de todos aquellos que no fueron salvos. Sin embargo, creyentes como esos serán juzgados verdaderamente de una forma breve. Yo creo que este es el juicio mencionado por el apóstol Pablo en 1 Corintios 3:15.

15 Si la obra de alguno es consumida por el fuego, sufrirá pérdida; sin embargo, él será salvo, aunque así como por fuego.

Yo no creo que este sea un fuego literal. Sin embargo, ellos serán juzgados por la ley de fuego de Dios, y en este caso se imponen aproximadamente 40 azotes. Todos aquellos cristianos que tienen a Jesucristo como un fundamento en sus vidas, pero quienes sobre ese fundamento edifican madera, heno, y hojarasca, sufrirán pérdida. Ellos serán responsables por sus obras, y las cosas que ellos edificaron sobre éste fundamento de la fe en nuestro Señor Jesucristo.

Sus OBRAS y sus personalidades deficientes, serán exhibidas y siendo probadas por el fuego, serán quemadas. Esto no los destruirá, sino que serán purificados a través de la reprensión y transformados así, para ser aceptados en el Reino de Dios.

Los incrédulos serán lanzados en el Lago de Fuego (Apocalipsis 20:14-15.) La pregunta es, ¿Es este un fuego literal y diferente al otro fuego por el cual es probado el creyente? Este será nuestro tema en el siguiente capitulo.